Texto: Silvia Huerta De soto Huarte
“De cuando el talento
corre por la sangre”
Eres suave como la luz del alba,
serena como el acuario verde, tu mirada.
Ruiseñor alegre en el atardecer grana.
Brote de ilusiones que derramas,
sabia, porque ves todo con el alma.
Invencible, la Fe tu única arma.
Inteligente, porque no calculas, amas.
Mi roca firme que siempre me guarda.
Dios te dió nombre de Madre
y en tu dulce entrega, día tras día
nos arropas como un tierno Platero
nos iluminas con la sal de la infancia
nos contagias de vida
nos haces familia
porque desde tu corazón de niña
sujeta nuestra mano,
poco a poco con tu ejemplo
nos muestras el Reino.
Te quiero mamá.
Silvia Huerta De Soto Huarte